Desde muy pequeña, no me ha gustado viajar, pero, siempre he encontrado interesante conocer las costumbres y tradiciones de diferentes nacionalidades y lugares. Desde mi punto de vista, mi amor por conocer la cultura de un lugar, surge por la cantidad de veces que me he mudado dentro del oriente ecuatoriano. A continuación, de una manera breve, les contare mi pequeña trayectoria. 

Cuando era pequeña, viví en la provincia de Morona Santiago, en una parroquia llamada Sevilla de Oro, pero, al cumplir ocho años de edad, viví durante un año con mi mamá en la parroquia de Macuma, ubicada en la provincia de Morona Santiago. La cual, destaca por su belleza y gastronomía. Sin embargo, su clima es demasiado caliente y por ello, mi madre y yo no nos acostumbramos a vivir ahí, a pesar de que ahí viven la mayor parte de nuestros familiares. En la parroquia de Macuma, es importante mencionar que, en tanto a la educación, solo existe una unidad educativa intercultural bilingüe, llamada Antonio Samaniego, la cual, se encuentra distribuida en las áreas de: inicial, básica elemental, medio superior y bachillerato. En ella, la lengua shuar no es considerada como una materia, al contrario, los temas son impartidos en la lengua materna de los estudiantes, el shuar, por ello, muy poco se interactúa en el idioma español. Al cumplir diez años de edad, viví en la parroquia Sevilla de don Bosco, ubicada en la provincia de Macas. Finalmente, a mis trece años de edad mi madre y yo nos mudamos a la provincia de Pastaza para estar más cerca de mi abuelito materno.